‘Un segundo’ de Zhang Yimou hoy en Cineclub El Gallinero

'Un segundo' de Zhang Yimou Cineclub El Gallinero

Zhang Yimou ha vuelto: al corral y a las películas eternas, aunque hablen de Un segundo. Su ‘carta de amor al cine’ contentará a todo plumífero volador con alma en el corpus y ansias de volar, tocando fibra y pasión con este particular ‘Cinema Paradiso’ chino. Sep, mucho tópicazo emotivo, pero la peli lo vale.

Un segundo inauguró la 69a edición del Festival de San Sebastián ofreciendo una nueva «carta de amor al cine» (tópico más que manido, pero útil en este caso) ambientado en la Revolución Cultural China en la que un preso de un campo de trabajo logra huir de su departamento y pone rumbo a un pueblo en el que se va a proyectar una película, que será tan importante para él como para una niña huérfana que se cruza en su camino. 

El director chino Zhang Yimou, uno de los pesos pesados de la industria cinematográfica china, con una amplia obra a sus espaldas que incluye relatos intimistas como La semilla de crisantemo y espectaculares wuxia como La casa de las dagas voladoras, optó por primera vez a la Concha de Oro en un festival del que fue presidente del jurado en 1997 con la que se ha denominado la «Cinema Paradiso» en la Revolución Cultural China.

Yimou reivindica la naturaleza táctil y maleable del celuloide, materia prima que imprime fragmentos de vida y los inmortaliza en pequeños cuadrados en los que la imagen de una hija puede ser un tesoro casi tan valioso como la propia existencia de esa hija. Frente a un cine digital que transforma la vida en un abstracto código binario, el celuloide mantiene las huellas de una presencia y permite su manipulación artesanal. 

En su celebración nostálgica de ese cine que ya no es, Yimou presenta la proyección en público (en crisis en el actual contexto de restricciones pandémicas y plataformas online) como un espectáculo social sin parangón. Alrededor de esa sala de cine, piedra angular del film, y del macguffin de la lata de celuloide, el tesoro más preciado, Yimou trabaja sobre la relación paterno-filial, ambos enfrentados de un modo naïve e incluso con correrías propias del slapstick al que homenajea con sutilidad, en contraste con el contexto trágico del desierto, metáfora de una China sin libertades en la que el cine es apenas el espejismo de una fiesta, logrando firmar sin embargo una película amable y de buen corazón; una de esas que se observan con una sonrisa en los labios, mientras uno se reconcilia con ese cine festejado y vitoreado que ahora parece cada vez menos importante. No hace falta decir que para eso estamos, servidores de ustedes, voladores de pradera. 

Miércoles 3 Noviembre | 20:30. Apertura de puertas 20:00 en el Teatro Cine Avenida | Jaraíz de la Vera. Entrada 5€ | Bonos de socio disponibles en taquilla.

Acerca de Cine Club El Gallinero 104 Articles
Averío confabulado para la difusión y el disfrute de la cultura cinematográfica, especialmente la relativa al cine-arte.

Be the first to comment

Deja un comentario